(Angel Asurmendi).-El nuevo Rector Mayor sigue con la costumbre que tenía Don Pascual. Al comienzo de una nueva semana de trabajos capitulares comenta una serie de orientaciones que nos animan en el trabajo que todavía nos queda por hacer.
Estamos en una semana clave para acabar la reflexión capitular sobre el documento y para precisar las decisiones de la comisión jurídica.
Ángel F. Artime, nos ha ofrecido hoy, en la sesión de la tarde, unos cuantos subrayados:
- En el primero, recojo el testigo que ya nos había trazado Don Pascual, cuando nos invitaba en una de sus intervenciones a ser más positivos y propositivos, valientes en la búsqueda.
Por eso, su invitación más importante se centra en proponer a la Asamblea Capitular que seamos realmente certeros y valientes para encontrar aquellas opciones, y tomar aquellas deliberaciones que realmente nos indiquen un camino en el que crecer en nuestra vida personal y comunitaria en profundidad. Proponer a nuestros hermanos, a la Congregación toda y a nosotros mismos aquellos gestos, signos y deliberaciones que no ayuden a ser profecía en este momento de la Historia, de la Iglesia y de nuestra Congregación. Y a encontrar aquellas huellas que seguir que nos lancen con atrevimiento a los últimos, a los más frágiles, a lo más genuino de nuestra opción salesiana por los pobres, en especial los jóvenes más pobres.
- La segunda invitación es la de seguir viviendo en este hermoso clima de fraternidad. De poco serviría un profundo documento capitular si nuestra vida compartida en estos casi dos meses no tuviera nada de valioso, pero no es así. Creo que el primer documento que estamos escribiendo es el de la fraternidad cotidiana, la cuidada experiencia de universalidad de Congregación.
Ha terminado pidiendo para todos nosotros la bendición de nuestra Madre Auxiliadora y de Don Bosco y deseándonos una feliz semana.
También ha dado gracias a Dios por la experiencia del encuentro con el Papa Francisco que hemos tenido esta mañana.